-señor Kim...¿ Puedes?. Dije mientras señalaba el kimono. Él me miro y se señaló confundido yo asentí.
- tu sabes atarlo mejor que yo, le dije a mi padre que no llamaría a ninguna persona para ayudarme así que no me dejes pasar vergüenza - dije él me miro- estaba completamente sonrojado, y Se acercó.
- eres bastante atrevida para ser una jovencita.¿ Acaso no tienes vergüenza de lo que dirán ? Yo lo mire.
- comparto el cuarto con un hombre buscado por la guardia.. ¿ Tu crees que lo hago? Pregunte ironica- El me sonrió mientras me colocaba el traje con bastante destreza que me sorprendia - ¿has vestido alguna vez alguna mujer?
- desvestido si... Dijo el con una sonrisa pícara, lo mire por el espejo.
-no te creó.. Dije mire como doblaba los nudos... ya va.. ¿si es cierto? Pregunte
-no te creó.. Dije mire como doblaba los nudos... ya va.. ¿si es cierto? Pregunte
- tengo una hermana menor-, tenía que ayudarla muchas veces- ella tiene como tu edad aproximadamente.. El me miró detallandome.. Si tiene tu edad.. Pero es mucho mas pequeñita que tú.. Dijo el mientras me rodeaba con los brazos yo me sonroje- pero era para alisarme el traje.
- Patrick.. - Dije él me sonrió.
- estas lista, dijo él. Yo le sonreí..
- Patrick.. - Dije él me sonrió.
- estas lista, dijo él. Yo le sonreí..
No quería ir.. Como decirle que no quería, como lo veria al otro día... Estaba tan avergonzada.
Me mire al espejo. Había una gran diferencia entre nosotros dos, él me sonrió
- ya creo que es tiemponde volver a mi cueva- yo lo mire incómoda y se volvió a ir al clóset, yo salí inquieta de la habitación suspire nerviosa y baje a la sala, junto a mi padre - el vestia ropa occidental- un traje gris de rayas y un sombrero pequeño negro- podia ver la tension en su rostro- el era un poco mas parecido a mi de lo que era con mi madre- tenia el cabello marron un poco teñido en las patillas por las canas una nariz enorme y redonda- y la piel rosada con algunas pecas en su rostro y en sus manos- yo mire el reloj de la sala con nervios- y lo mire- a él jugar nervioso con su tabaco-
Nuestra casa tenía 4 habitaciones, -
una era la mia, la de mi padre y las otras dos de visitas, pero había una habitación grande al estilo japonés en el piso de abajo- una especie de salon estudio- que era donde mi padre invitaba a veces a sus invitados japoneses- cuando no era en la sala la de estar-
La rutina siempre era Primero comenzar la reunión en la sala, yo cantaba algunas canciones,- mientras tocaba el piano- solo sabia una canción- la practicaba tantas veces - a veces si venían acompañados con mujeres nos tocaba cantar alguna cancion en japonés- solamente yo sabia dos y siempre pronunciaba mal alguna palabra-
la mayoría de las compañías eran chicas con cara de sufrimiento, delgadas y pálidas, con olor a jabón barato y marcas de golpes en sus brazos-sentia pena por ellas cada vez que venían- muchas veces si no nos veían yo les daba algo de dinero para que ocultaran en sus mangas- , hoy nos visitaba el Comandante Akita y el doctor del ejercito cuyo nombre no sabia, y otro más alto mando. Ambos estaban acompañando de jovencitas no mas jovenes que yo- menos el comandante, él vigilaba cada uno de mis movimientos, el comandante akita no tenia unos mas que unos 25 y habia sido nombrado comandante por el poder de su familia-
En la reunión aparte de estar jugando a las cartas con mi padre- el cual siempre perdia- y cantando - habia una de las chicas que sabia tocar el piano- en verdad era mucho mas refinada que yo - ya que sabia mas canciones clasicas-
fuimos a la habitación japonés, mientras a nosotras nós tocaba rellenar el licor de cada copa, era incomodo estar con el kimono, las dos chicas compartían la misma mirada, - estábamos aterradas por mas que sonreian - aunque sabian que yo estaba en su misma situación me ayudaban- , teníamos que embriagarlos más y más, para que estuvieran menos tiempo concientes.
Los dos acompañantes se fueron en algun momento- al darme cuenta estaba sola con el comandante akita- el me tomo del brazo y me sento en sus piernas- él era mas bajo que yo- aunque no era feo- no era una compañía agradable- .
- pequeña Daghne-san estamos solos. Dijo acariciando mi rostro- tomo un mechon que tenía suelto y jugueteo con el- Daghnen-san sabes lo que tienes que hacer.
- si mi sensei, dije mientras asentía.
- ven aquí, dijo mientras hundia su cabeza en mi cuello- Suspiré agotada y me acomode en sus piernas quedando frente a el- Mientras soltaba mi cabello.
- si mi sensei, dije mientras asentía.
- ven aquí, dijo mientras hundia su cabeza en mi cuello- Suspiré agotada y me acomode en sus piernas quedando frente a el- Mientras soltaba mi cabello.
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